Este mes, la región amazónica tiene dos motivos de celebración: el Día de la Amazonía Ecuatoriana que se festeja este 12 de febrero, y el fallo de la Corte Constitucional a favor de la comunidad A’I Kofán de Sinangoe, garantizando autonomía sobre su territorio.
“Es una sentencia increíble,” dice Alex Lucitante con emoción evidente en su voz. Alex es líder de la comunidad Kofán Avié y forma parte de la Alianza Ceibo, una organización formada por las naciones A’I Kofán, Siekopai, Waorani y Siona con el fin de proteger su cultura y su territorio.
Desde el 2017, Alex ha apoyado a la comunidad Sinangoe en su lucha para denunciar la presencia de minería ilegal y concesiones mineras en territorio Kofán. La reciente sentencia de la Corte Constitucional determina que el Estado ecuatoriano debe pasar por un proceso de consulta y, además, obtener el consentimiento de los pueblos indígenas antes de realizar actividades extractivistas en sus territorios.

La noticia que llegó a principios de este mes significó una victoria tras cinco años de lucha. “Compañeros de la comunidad gritaban ‘ganamos, ganamos’. Fueron momentos de mucha emoción, de mucha alegría,” agrega Alex.
La Amazonía es la selva tropical más grande del mundo y está conformada por diversos ecosistemas donde viven miles de especies de flora y fauna. Según varios reportes, la destrucción de la misma puede tener efectos catastróficos para el planeta. Y en la lucha contra el cambio climático la conservación de la Amazonía es primordial. Solo la amazonía ecuatoriana se extiende 120 mil kilómetros cuadrados en dimensión y el 70 por ciento es territorio de pueblos indígenas.
“¿Quién debe decidir sobre nuestra Amazonía?”, se pregunta Alex y responde inmediatamente lo que para él es una certeza: “Somos nosotros, las comunidades indígenas quienes conocemos mejor que nadie los territorios donde vivimos.”
Alex, al igual que integrantes de la nación Kofán y los de las otras 13 naciones indígenas que existen en el Ecuador dependen de los ríos para la pesca, de sus plantas para su medicina y de sus tierras para su alimento.

El río Aguarico, uno de los más importantes de la provincia de Sucumbíos, iba a ser afectado por las más de 50 concesiones mineras que estaban proyectadas para extraer minerales en esa zona. Esta sentencia puso fin a esa actividad y enfatizó que “el derecho de naturaleza colectiva de los pueblos indígenas debe ser respetado dentro de un Estado plurinacional y cultural”.
El fallo de la corte trae consigo un aire de esperanza. Sienta un precedente importante para otros pueblos indígenas que buscan autonomía y poder de decisión sobre sus tierras. Este día de la Amazonía ecuatoriana, sí hay un logro por el cual celebrar.
Fotografías: Murray Cooper