La historia de Cuenca comienza en El Vado

-

- Publicidad -spot_img

El Vado fue el primer barrio de Cuenca. Se estableció a mediados del sigo XVI, al mismo tiempo que se fundaba la ciudad. En ese entonces, para llegar a la llanura de Paucarbamba (antiguo nombre de Cuenca), era necesario «vadear» el Tomebamba. De ahí su nombre. La cruz que reposa en su cima representa la protección para aquellos que tenían que cruzar el río. Hoy, es un hermoso mirador que conserva la esencia y tradiciones de la ciudad que se contempla desde este, su ‘balcón cuencano’.

En tan emblemático sector se ubica el hotel Cruz del Vado, con la inconfundible elegancia que le permite no pasar desapercibido. Su fachada conserva su mármol italiano, uno de los lujos con los que esta casona fue convertida en una estadía de lujo. La planta baja está construida con adobe, mientras que el resto de pisos mantiene el tradicional «bareque» con el que se construían las casa en época colonial. Con este enfoque de restauración y preservación de propiedades históricas, la cadena Art Hotels convirtió este en su tercer hotel boutique del país.

Amalgama de épocas

Entrar al hotel es como trasladarse a épocas pasadas… y a la vez, futuras. Los inmensos espacios, el color ladrillo de las paredes y las llamativas lámparas, muebles y decoraciones conservan su estilo tradicional. Por otro lado, las esculturas y pinturas en cobre, sus cuadros y acabados de lujo otorgan la modernidad necesaria para crear la amalgama de épocas con la que Art Hotels se caracteriza.

Sus veintiséis habitaciones se dividen en Deluxe, Superior, Premium y Luxury, todas ellas con un ambiente republicano y acabados de lujo. La altura de los cuartos es definitivamente algo que recalcar ya que, al igual que sus hoteles hermanos, llenan el espacio de una sensación de confort única. Los balcones y las vistas del Tomebamba desde las habitaciones Luxury no tienen comparación ya que, claro, su cercanía al río hace de su ubicación toda una experiencia.

Si de vistas hablamos, el restaurante y rooftop bar ubicados en el tercer piso tienen el encanto de la ciudad en sus ‘paredes’. Los grandes ventanales de esta, la parte más moderna del hotel, permiten tener una vista panorámica de la ciudad, desde su parte moderna hasta las emblemáticas cúpulas de la Catedral de la Inmaculada Concepción. Y qué decir de la gastronomía, una infusión de sabores que preservan los ingredientes tradicionales que todo cuencano disfruta, como el pinol y el morocho.

Además de su emblemática arquitectura, las paredes de Cruz del Vado cuentan historias a través del arte. Y es que claro, este es un lugar para conectarse con la cultura. En los alrededores se encuentran negocios de profesiones antiguas como la confección, remodelado y limpieza de sombreros, construcción de guitarras e instrumentos de viento a la manera artesanal y manualidades de cobre. Los talleres de quienes se siguen dedicando a estas artes pueden visitarse gracias a los tours guiados que provee el hotel.

Haz tu reserva hoy mismo haciendo click en este enlace. Disfruta de la exclusividad de hospedarte en uno de los barrios más especiales de la ciudad, a tan sólo unos metros de su cruz y el único monumento en honor del «palo encebado» en Ecuador.

CONTACTO

La Condamine 12-56 y Tarqui, sector el Vado. Cuenca – Azuay. Ecuador.
(+593) 7-284-0100
cruzdelvado@arthotelsecuador.com
https://hotelcruzdelvado.com
Fb: /HotelCruzDelVado
Ins: @hotel.cruz.del.vado

Fotografías: Juan Fernando Ricaurte
Fotografía de portada: cortesía Cruz del Vado

Artículos Relacionados

- Publicidad -

Artículos Recientes

- Publicidad -

También podría interesarte
Recomendado para ti