El arte de atrapar los sueños

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En el taller Arte Nayia, nada se hace al azar. Cada elemento que compone los atrapasueños que aquí se producen tiene un significado, un motivo… Quizás no somos conscientes de ello, pero nosotros no escogemos el amuleto, dicen que es él quien nos escoge.

Sauces, semillas, plumas, cocos y hasta cuernos de toro o mandíbulas de borrego son parte de estos populares adminículos, ahora producidos en Peguche. Pero no te preocupes, todos los materiales son recogidos y reciclados con respeto a la Pacha.

Todo empieza cuando Jorge Musuña y Mónica Imbaquingo conocen a un grupo de nativos norteamericanos en tierras italianas. A medida que entraban en contacto las culturas, Jorge, de decendencia puruwá, se mostró particularmente interesado en los atrapasueños. Al tenerlos entre sus manos, notó que eran muy parecidos a objetos que le recordaban a su pasado. No sólo se asemejaban en sus formas, sino también en las historias que contaban.

Poco tiempo después, de vuelta en Imbabura, un grupo diferente de nativos norteamericanos visitó a la familia Musuña. Ahí se realizó un intercambio de saberes en el cual ambas culturas se nutrieron mutuamente. Dentro de ese compartir, también se enseñaron los procesos de recolección y manufactura de sus objetos de poder. Entre ellos, por supuesto, los atrapasueños. Mónica describe a este evento como el «encuentro del cóndor y del águila: el reconocimiento de una sola América».

Dieciocho años han pasado desde que los atrapasueños se han convertido en una actividad diaria para Jorge, Mónica y Nayia, su hija por la cual el taller lleva su nombre y que se traduce como ‘dulce’. No hay rincón que esté libre de estos amuletos. Algunos pueden entrar en un bolsillo, mientras que otros están colgados del techo y alcanzan a tocar el piso.

Los hay de todas las formas y tamaños, multicolores y sobrios, decorados con plumas de pavos reales o domésticos. Es indudable que uno encuentra el suyo propio.

Un proceso natural

Todo atrapasueños empieza con la recolección de los objetos naturales que lo componen. Algunos provienen de bosques cercanos de la provincia, pero otros requieren de viajes más largos hacia el centro de los Andes y la Amazonía.

El principal objeto es el sauce, un material fuerte y resistente que utilizaban los abuelos para hacer vigas. Después se realiza un secado templado de dos a tres meses, dando tiempo a que la próxima recolección también sea provechosa. «Todo es un ciclo, una cadena», explica Mónica.

Al pertenecer a la naturaleza, el objeto es un amuleto que otorga energías positivas, explica Nayia. «Al ser en principio redondos, también se los relaciona con los ciclos del sol, la luna y la Tierra», agrega.

Cuenta que se lo debe colocar encima del espaldar de la cama ya que por la noche purifica los sueños y pensamientos que se regarán al día siguiente con ‘carga positiva’ sobre uno como gotas de rocío.

Hay una clave importante al momento de tejer un atrapasueños: la concentración. Todo lo que está pasando mientras uno realiza la actividad influye hasta en el más mínimo detalle. Cuando nosotros aprovechamos el taller, la guía de Mónica y Nayia fue crucial para no solo crear la forma necesaria, pero también intentar invocar la calma y espiritualidad necesarias para crear un objeto más compenetrado con nuestras energías.

Los detalles finales ya son personales. Puedes decorar tu atrapasueños con semillas y plantas como el wayruro, símbolo de protección y unión; con cerebrito, ojos de buey, eucalipto o pambil… Hay de todo. Lo mismo en cuanto a los colores, hay que escogerlos bien ya que cada uno tiene su significado. El café, por ejemplo, representa la confianza y el equilibrio; el turquesa atrae la salud; el verde, la vitalidad. Tú eres, a final de cuantas, quien sabe lo que realmente necesitas.

Programa tu visita al taller Arte Nayia para conocer y fabricar tu propio amuleto. Contáctate con Hotel Otavalo para más información y disponibilidad.

CONTACTO

Calle Vicente Ramón Roca y García Moreno, Otavalo – Imbabura. Ecuador.
(+593) 6 292 8710 / (+593) 6 292 8711
(+593) 993 41 2224
otavalo@arthotelsecuador.com
https://hotelotavalo.com
Fb: /HotelBoutiqueOtavalo
Ins: @hotel.otavalo

Fotografías: Paula Holguín

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